SALIGIA. 7 PECADOS CAPITALISTAS
LUXURIA
Del latín 'luxuria' (abundancia, extravagancia) y éste de 'luxus' (dislocado). Luxuria es una forma extraída de la más latina luxuries, que quiere decir derroche desatado y lujo desmedido, generada a partir del sustantivo luxus (lujo, fausto y exceso). En latín luxuria nunca se refirió a excesos de apetitos sexuales, sino al derroche y ostentación desmedida, mal vista en general por los romanos. A diferencia de este término, 'lascivia' si tenía connotación de desenfreno sexual.
Fue San Agustín quién identificó el lujo y adorno excesivo con un pecaminoso síntoma de intención o deseo sexual, que es lo que se empieza a conocer como luxuriator, término que hacía referencia a scortator (el que vive en prostitución)1
Definido como el ansia desordenada del placer carnal, la Biblia lo llama ‘fornicación’, ‘adulerio’,tentación de la carne’.
6:09 No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
6:10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.
Pero en la gran parte del mundo, este ‘pecado cristiano’ no se condenaba, se celebraba. En la Grecia Clásica, las fronteras y los caminos se marcaban con gigantescos falos de piedra llamados Herma, en honor a Hermes, dios de la fertilidad. Para los griegos el sexo formaba pare de la religión. La palabra griega ὄργια (orgía), originariamente significaba ‘ritual secreto’. No era un tabú, era una experiencia sexual perfectamente aceptada por las clases altas.
En el caso de la cultura romana, la ciudad de Pompeya aún conserva una gran cantidad de arte erótico. Las pinturas datan del s. I d.c., algunas realizadas en antiguos prostíbulos. El culto romano a la sexualidad alcanzó su apogeo durante el reinado del emperador Calígula en el año 37. Se dice que el joven emperador exigía tener relaciones sexuales con todas las mujeres atractivas de Roma, incluyendo a sus propias hermanas. Se rumoreaba incluso que había convertido parte de su palacio en un burdel en el que obligaba a mujeres a prostituirse para su propia diversión.
El asesinato de Calígula a los 28 años de edad, fue considerada como una señal de la ira de los dioses por su abuso de poder de la lujuria. Los romanos convirtieron la sexualidad en una deidad: Venus.
En el año 590, el Papa Gregorio Magno además de modificar la lista de las 8 tentaciones –dejándolas en 7-, otra de las transformaciones que llevó a cabo fue la declaración del celibato para todos los sacerdotes de la iglesia católica romana. Hasta entonces, los sacerdotes cristianos podían contraer matrimonio, hecho curioso Se cree que esta imposición se estableció como mecanismo para consolidad el poder de la Iglesia. El Papa Gregorio no quería que las propiedades eclesiásticas fueran heredadas por los hijos de los sacerdotes y de los obispos. Esta norma tuvo una repercusión mayor. La idea del celibato evolucionó, ya que lo que nació como condición monástica acabó conduciendo a una denuncia generalizada de la sexualidad y de la lujuria. La iglesia estaba en contra del hedonismo. Declaraban que la sexualidad debía cumplir una única función de reproducción, cualquier cosa que lo alejarse de ese cometido era considerado pecado. Para contrarrestar los 7 pecados la iglesia creó 7 virtudes. En el caso de la lujuria, su equivalente era la castidad.
Los teólogos medievales creían que el el problema no estaba solo en la lujuria, sino en cualquier forma de sexualidad. En aquella época existía la creencia de que un pecado podía poseer a una persona y habitar en su interior. Cada pecado tenía un demonio asignado, que solo podía ser quitado mediante el ‘exorcismo’. Pese a la contundencia moral de este pensamiento cristiano y al mandamiento bíblico que lo sostenía, no fue suficiente para disuadir a una de las primeras sectas cristianas. Se trataba d un grupo de radicales que contemplaba la tentación sexual celebrando la lujuria como un sacramento, en vez de denunciarla como pecado. Se trata de la Secta Carpocratianos.
Conocidos son sus rituales que consistían en el desnudo integral de sus adeptos, así como el masaje en grupo y la culminación del rito con el acto sexual entre el sacerdote y la sacerdotisa.
En el s IV el obispo Epifanio describió la orgia gnóstica. Se cree que esa descripción era un mecanismo para condenar a esos grupos religiosos y así seguir imponiendo la moral cristiana basada en el celibato y el decoro. En esa época se castigaba mucho la erigía y muchos deseaban acusarles de todo tipo de pecados. La institución religiosa quedó ilegalizada y desapareció en el s IV.
Y es que nadie podía escapar de la tentación. Ejemplo de ello sería cuando a los monjes les asaltaban pensamientos lujuriosos los apartaban acercando sus dedos a las llamas de las lámparas de aceite. Era su manera de pensar en el dolor en lugar del deseo.
Dante ya lo recogió en su novela Divina Comedia, en el año 1320. En su obra describe los 9 círculos que confieren el infierno y en ello sitúa a los 7 pecados. El pecado de la lujuria se encuentra en el segundo círculo. La novela castiga a aquellos se dejaron llevar por el deseo lanzándolos por el aire, siendo golpeados sin descanso por vientos abrasadores. Simboliza el tormentoso poder de la lujuria. Es una tentación en la que el propio autor también cayó.
Atendiendo a la teoría de la teología cristiana que concibe los pecados como posesiones demoníacas, los demonologos le asignaron a la lujuria Asmodeo. El nombre, probablemente procede de la deidad pagana persa aeshma daeva, mencionada en el libro de Tobias. En ese relato, el demonio posee sexualmente a una joven y la obliga a matar a 7 hombres que la pretendían. Algunos textos, como sucede en el testamento de Salomón, se cree que el demonio podía ser controlado mediante conjuros.
Presencia en otras religiones
Una de las culturas con mayor tradición sexual ha sido la cultura Hindú. Los templos de Kaborao fueron decorados con miles de figuras en complicadas posturas sexuales, recogidas en el Kamasutra. Este antiguo libro Hindú recoge 64 artes o posiciones y habla en gran detalle de los sagrados aspectos de la prostitución, sexo en grupo, homosexualidad y sadomasoquismo. En kamasutra sexo y religión son inseparables, también en la cultura grecorramana se construían monumentos para celebrar la sexualidad.
En contraposición de la celebración de la sexualidad que hace el Hinduismo, la concepción de ésta cambia totalmente en las culturas del judaísmo o del cristianismo. Este pensamiento se debe a que en oriente próximo la tierra no es una deidad, es una cosa. No existe la celebración de la sexualidad entre dioses, solo reina un único Dios. El antiguo testamento cuenta con una lista sobre lo que se debe y no debe hacer: los 10 mandamientos, los cuales guían por el camino recto y alejan a las personas del pecado. En el listado, dos de ellos aluden a la lujuria:
“No cometerás actos impuros” y “no pensarás en actos impuros”.
Existe una preocupación por el enorme poder del deseo sexual. El judaísmo entiende que el deseo es rebelde y que siempre se desean cosas que no se deberían tener, pero el deseo en si no es pecado, depende de lo que se haga con él. Considera que puede ser controlado. Pero a diferencia de ello, la cristiandad heredó y amplió este concepto de deseo. Cuando Jesús dice a sus discípulos que comete el pecado de lujuria incluso aquel que mira con deseo a una mujer, enfatiza los pecados de pensamiento.